domingo, octubre 31, 2004

Lunaranja y la ficción posterior.

Es extraño volver a extrañar (valga la redundancia). Me pregunto dónde habrá estado tanto tiempo varada mi utópica ilusión, que viene a hacer pie en esa playa frágil, inestable, casi un espejismo. Pero no hay respuestas a mano. También quisiera saber de qué material está hecho este sueñito de seguirla, de bajarle soles o hundirme en mares, de noches de verano a la par, de caminar y caminar y caminar, y reir y caminar. Y.
Claro, siguen ausentes las contestaciones. Y yo también. Porque siendo pregunta no me puedo considerar parte de un lugar que exije respuestas como condición para existir. Y porque en este instante soy preso de un ahogo que pide más que aire... pide tu aliento. Necesito respirarte. Me siento exclusivamente inútil sin ese ave negra, femenina, que lleva una esperanza en sus alas. Esperanza que me pertenece.

viernes, octubre 29, 2004

Sería hermoso que la canción no fuera sólo coincidencia. O que fuera una coincidencia más profunda. Sería hermoso que morir en la India tuviera las iniciales de un amor doble y concreto. Hermosísimo sería hablar de eclipses y teorías y planetas y vida y muerte mientras miramos la misma noche, desde el mismo jardín, con las manos enredadas.
Y quizás algún día la hermosura se pegue una vuelta por el estrecho sendero que compartimos sin tocarnos. Pero "quizás" es una palabra hecha para desalentarme.

sábado, octubre 23, 2004

Si el sol te mira a los ojos
yo ya no puedo mirar otra cosa
como cuando la cara te roza
y trepo al delirio de mis antojos

Sé que escribirte es tirarme
un poco más al abismo
aunque en verdad es lo mismo
si no querés sujetarme.

viernes, octubre 15, 2004

La máscara sensual.

-Decime, a ver... ¿por qué para que entiendas que te quiero es necesario que te haga pensar lo contrario?

El silencio gana la lucha contra la conversación. A partir de ahí, se cruza una mirada cargada de razones, de ciencias, pruebas y contrapruebas sobre por qué el sueño de jugar para divertirse es sólo un sueño. Sabe que la está haciendo pesada, densa e insoportable. Sabe que lo tiene agarrado de la cola y más. Pero no sabe que él está a punto de entenderla.
Entonces, sólo entonces, la cabeza del condenado hace erupción y explota una idea cósmica que voltea la realidad. Saca el pie de su cabeza, se limpia el polvo, y comienza a crecer desmesuradamente. Su sombra ya baña la anatomía de la ahora pequeñísima mujercita.
Nace una nueva verdad.
De pronto la situación es el espejo. La muchacha olisquea el aire y se da cuenta de que perdió su aroma a premio mayor y carga con el rótulo de "molestia" en la frente. Revisa alrededor, y sólo encuentra los dientes de una sonrisa despojada de cualquier piedad. Está colgada de un diente. No hay sogas, no hay nubes, no hay agua... pleno abismo de la indiferencia, y ella por caer a causa de un capricho inútil que se transforma en paradójico castigo, en la moraleja asesina:

- ¿Ves? Ese es nuestro abismo. Si te tirás, nos une. Si te vas, nos separa. Si te quedás colgada, nos destruye.

lunes, octubre 11, 2004

¿La pileta o el abismo imaginario?

En la pileta hay agua... quizás no sea pura, ni de la temperatura ideal. Tiene una superficie cómoda, y un contorno más que aceptable. No muy profunda, pero da para nadar.

En el abismo... hay oscuridad, y mucho olor a golpe. Pero es imaginario. Y hay "allá a lo lejos" y "quién sabe qué". Pero es imaginario. Y una tentación, una esperanza. Pero es imaginario.

Y entonces, uno elige, siguiendo el juego de la estupidez, el abismo. Y se tira del cordón de la vereda.
Perdido por perdido (perdido al cuadrado).

Perdí y me perdí, y nos perdimos.
Perdí esa boca dulce y pequeña. Me perdí la sonrisa incoherente. Nos perdimos una noche de amor.
Perdí el aire compartido. Me perdí un poco de amor tibio. Nos perdimos sin querer.
Perdí lo que nunca había ganado. Me perdí en el final de la noche. Nos perdimos, por ahora.
Perdí la iniciativa. Me pardí entre las luces. Nos perdimos la función.

jueves, octubre 07, 2004

La humanidad es algo tan poco "natural" que me extraña.
Hay una conjunción ideal en lo que se puede llamar El Mundo, entre animales, plantas, hongos y demás. Y, como si fuera un zorro en un gallinero, está el hombre. Esa raza que no cierra con todo lo demás. Esa plaga inútil que sólo sirve para autosatisfacerse a cualquier precio.
La humanidad es indefendible. Sólo los humanos pueden defender a los humanos. Y, lo más triste, es que se matan entre ellos.

martes, octubre 05, 2004

Me gustaría ser sueño, para gestarme por una ilusión fabulosa, noble. Para alimentarme de pequeñas huellas diarias puestas en un camino férreo e incorregible que tiene esa meta paradisíaca como un dios a alcanzar. Para sentir el latido del corazón ajeno cuando me acerco lentamente hacia su existencia. Para abrazar su sombra y darle el amor que siempre quiso. Y, finalmente, para estallar y morir en el orgasmo que es hacerse realidad sin tener que vivirla.

domingo, octubre 03, 2004

Noche de baches es la que se viene muriendo, aunque no sé si debería usar el plural. Resulta que fue todo como lo planeaba, pero casi. La cola del diablo siempre cruza la línea final antes de que puedas cortársela. Y no vale menos este empate de último minuto que parece ser más derrota que otra cosa.
No quiero dejarme tirado en un rincón, así que mejor aprovecho la cama. Pero esquivar charcos con una superior a cuestas es complicadísimo. Siempre en estado de espera.

sábado, octubre 02, 2004

Sí, yo sé que estoy buscando llaves para abrir puertas que no llevan a ningún lado.

viernes, octubre 01, 2004

El curso del río sin río
el aire más tenso
más aun, también
el denso respirar y la paz
de la mirada atrapada
en el anzuelo de una caña
colgada en la nada.

El calor del frío de todo
en el film de un
tácito sujeto extraño
que se parece a mí.

Anteojos rojos clásicos
al contacto con el vidrio
de un estático visor
a quien todo maravilla
desde el pasto verde
al inmenso multicolor.