va asomando en lontananza
y en la punta de su lanza
se pueden ver corazones
adornados con canciones
perfumadas de esperanza.
Ha sido larga la espera
que puso a prueba sus ansias
(pero no así las distancias)
y aletargó esas banderas
hasta que esta primavera
presentó su scaramanzia.
El apremio hoy condimenta
la antesala del encuentro
que se agita desde adentro
como una dulce tormenta.