martes, marzo 28, 2006

El naufragio.

Opacado en la poesía por un brillo sublime
ya venía naufragando hace un rato
ya conocía la isla como la palma de mi mano.

Pero, curioso, te busqué por la audacia
o por la divina tentación del averno
o por tu silencio de secreto a los cuatro vientos.

Te desnudé junto a mi inocencia
y el híbrido de nuestro amor me crió.
Fuimos padres del hijo que soy,
con toda la perversión que le aflora.

Y entonces, naufragando.
Y ahora, naufragando.
¿La diferencia?
Tenía una balsa de cristal.

La elección por ahora es dura.

2 comentarios:

Comentarios: dijo...

Hay un dios dentro de cada bicho que camina
la realidad es la verdad q nos da esta mentira ...


Ya no se cual es la realidad, la verdad, o la mentira!

Espero qe andes bien osis, yo estoy =)
cuidate!Abrazon

F e r u dijo...

Esta bastante dura la mano eh.. ojala esta balsa nos lleve a puerto... o no,. tal ves ser naufrago es mejor que pertenecer.

que grande que sos chabon.
feru .