jueves, junio 26, 2008

Tengo.

Tengo un amor hermoso y mañoso,
que se tensa y se sosiega, que me afirma y que me niega,
y arrastra un poco los sueños cuando carretea
para levantar vuelo al instante, elevarse, elevarnos, salvarnos.

Es un amor afiebrado, que cuando está sano reluce
y cuando enferma lo cuidamos, por más que a veces pensemos
que no es tanto lo que sabemos, o que quizás no encajamos
para ser los doctores de un paciente tan sensible.

Pero sana, y sana, y sana, y es mejor con cada día
porque poco a poco aprende de las recaídas.
Entonces suaviza las jornadas, le pone alas a la nada
y otra vez al cielo, lejos del hielo y del suelo.

Tengo un amor de colores, un enchastre de arcoiris en las paredes del cuore.
Tengo un amor de sabores, los más dulces, los mejores.
Tengo un amor perfumado, con jazmines y melones, con limones refrescado.
Tengo un amor auditivo, en el canto de la sirena que al mar me ha entregado vivo.
Tengo un amor en el tacto, a lo largo de la piel, con un roce siempre exacto.

Entonces lo tengo todo hasta cuando creo que no hay nada,
porque ahí aparece un hada que me inventa el universo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Tengo a un Iván
en todos los sentidos,
y si no tuviera sentido
lo querría tener igual.

Te amo más que a pegar estrellitas luminosas en el techo y las paredes de mi pieza.
(Uh no sabés, me hice toda la galaxia(o:O)