martes, septiembre 30, 2008

Celebración.

Mira cómo se conjugan miles de sonrisas a bordo de una voz,
que sube la apuesta y la marea o baja ángeles entre palabras.
El licuado espiritual está a punto de estallar por sobredosis de emoción:
tantas almas no tienen contención si hierven al mismo tiempo.
Bailan en todo el paisaje, que es una pista inmensa... o lo que quieras,
porque acá no hay más que desear una alegría para abrazarla.
Ritos y rituales, mitos y verdades, todo es lo mismo para este ejército de la pasión,
que siente y por eso va embelesado tras su ensueño melódico,
en busca de una conmoción que les sacuda los anaqueles más íntimos
y renovarse así, empapándose de festejo y vida, bañándose en la eternidad de un momento feliz.

1 comentario:

Capitan Bondiola dijo...

Ivanchus:

No nos vimos el finde, pero bue.
GROSO INDIO CARAJO!

Adieu!