martes, junio 06, 2006

A la banda amiga.

Estamos y están... no todos juntos, ni todos cerca... no importa tanto tampoco.
Y es que aparecen y desaparecen, pero nunca olvidan lo que siempre tiene que subsistir como un imán en la heladera de la memoria.
Somos... y así, siempre habrá nacimientos de anticristos algunas noches, semidioses perdidos por las tardes o cristos redentores mientras incubamos una resaca que al despertar sabrá poner los puntos de sutura y consejo.
La vida nos va a volver viejos, pero precisamente esa vejez tendrá, por lo menos, recuerdos a los que recurrir para hacerle trampas al tiempo.
Enamorarse de la vida no está nada mal.

No hay comentarios.: