Cumpliría la condena perfectamente si me enjaularan por el crimen de ser feliz con sólo olerte. ¿Sería cadena perpétua por el agravante de amarte? No importa. Pero estoy encadenado a este suceso, a esta nueva era que arrasa con mis perennes ganas de apostar. Ganas que ganan aunque no tenga ganas de que así sea.
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