Desconectados o estrechos, hay algo extraño
que me niega las llaves para abrir esa puerta
y salir de este amorío transparente,
de esta ternura muda (y algo ciega también).
Y otra vez ocaso y mar y ese deseo amarillo
como el mismo desangrar del sueño.
Hay veces que una melodía y una inspiración
aportan al corazón
todas las vitaminas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario