domingo, febrero 11, 2007

Comándame hasta el Sol.

Con los humos del santo y las babas del diablo, este engendro, hibrido de averno y edén, quiere resurgir del ceniciento lecho donde quedó dormido, para encender las antorchas que puedan iluminar nuestro oscuro presente.
No pasa nomás porque te hayas quedado con todo el sol en la repartición de bienes (que te lo merecés, indudablemente, como si fuera la tenencia del hijo que somos) (hijos de él mismo); el tema también tiene que ver con espacios que están más vacíos que el vacío, y hoy creo (aparte de verlo como antes) que vos podés llenar cualquier hueco en este amor.

"es por eso que te pido que nos vuelvas a la vida
que despiertes a toda la sangre que está dormida
algún día esta cuadra va a ser como vos querías
y mañana será todo el barrio el que te siga".

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